Cada compra es una decisión que está influenciada por quiénes somos y cómo estamos. Por ejemplo, si somos optimistas o pesimistas con respecto a nuestra situación económica y a la del país, define parte de qué tanto estamos dispuestos a gastar, no solo en bienes duraderos, sino también en productos de la canasta básica.
La percepción del shopper respecto a su situación financiera personal, tanto pasada como a futuro.
Shopper Lluvia
Aunque tienden a gastar por arriba del promedio, son personas cuyas finanzas han desmejorado y ven el futuro gris. Si los pudiéramos definir en una frase sería: “Hemos estado mejor”; 24% de los mexicanos buscan gastar únicamente en lo básico y lo necesario.
Shopper Frío
Ven que su situación económica ha empeorado y no creen que vaya a mejorar pronto. Son los más pesimistas y quienes menos gastan. “Vivimos estirando el dinero”, es su lema.
Son el 26% de los hogares y tienen un gasto muy controlado, se ayudan de hacer lista de compras para ir sólo por lo que necesitan. Son Shoppers muy estructurados. Sus compras las realizan con cabeza fría y no se dejan llevar por nuevos productos.
Shopper Cálido
Tienen la sensación de estar mejor que un año atrás y así se proyectan para este año, pero su gasto todavía es bajo. “Año tras año, vamos mejorando poco a poco”, se dicen.
Representan al 28% de las familias y aunque no tienen tanto dinero en su monedero, están más abiertos al consumo y a probar diferentes productos.
Shopper Soleado
Sienten que sus finanzas están y estarán mejor. Además de ser los más positivos, son los más gastadores y se rigen bajo el lema: “tenemos confianza, siempre estamos mejor”. Son el grupo menos numeroso, representan el 22% de los mexicanos. Además de optimistas y gastadores, están más abiertos a probar innovaciones. Se dejan llevar al momento de comprar.